Bocados de realidad CVIII
En estos tiempos del coronavirus no me llaman mucho la
atención las fotos. Es como si esa realidad que lo invade todo fuera la única
realidad que se puede fotografiar ahora y que cualquier otro tema que, de
alguna manera, no se refiera a ella es banal. Hoy, leyendo el suplemento Babelia
de El País, me he topado con un artículo y una pequeña selección de fotos del
fotógrafo Txema Salvans, agrupadas bajo el tema Perefct Day. Me han gustado tanto que hasta he decidido hacer una
entrada para el blog. Quizás sea porque en esas fotos se aprecia que esa vida en el
exterior que ahora tanto echamos de menos no es tan idílica como nos parece
recordar.
The Waiting Game II
Pero…
Asociamos erróneamente, como yo he hecho más arriba, la
felicidad de un momento a encontrarnos en un paisaje idílico, cuando no es así.
Seguramente todos tenemos almacenados en nuestra memoria momentos catalogados
como especialmente felices que transcurrían en espacios, no ya idílicos, sino
incluso lóbregos. Y es que la felicidad, como casi todo, o sin casi, no está en
el exterior, sino en nuestro interior y así, según nuestro estado de ánimo, un
día meteorológicamente triste puede resultarnos hermoso o insoportable.
Sin duda este otro punto de vista da otra dimensión a las
imágenes de Txema Salvans.
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