Bocados de realidad II
(Cada semana una fotografía)
Algo que descubrí cuando me decidí a navegar por los grupos
de Flickr fue que las fotos que a mí me gustaba hacer no eran nada originales,
me refiero a las abstractas (abstracto,
ta: 1. adj. Que significa alguna cualidad con exclusión del sujeto) y a las minimalistas
(minimalismo: 2. m. Tendencia estética e intelectual que busca
la expresión de lo esencial eliminando lo superfluo). Lo mismo ocurrió con
algunos de los motivos que solía escoger; pensaba yo ingenuamente que
fotografiar reflejos en el agua era una ocurrencia mía y me encontré en Flickr
una enorme cantidad de grupos y consecuentemente de fotografías dedicados
exclusivamente a ese tema. Esto es normal, ocurre en cualquier actividad cuando
se realiza de forma individual, sin contrastarla con la que realizan otros en
el mismo terreno. El de los reflejos en el agua perdió para mí cierto interés,
pero en el caso de las abstractas y minimalistas seguir a estos grupos me
sirvió para aprender e incentivó mi interés en esos tipos de fotografía.
Debo decir aquí que aún no debo dominar perfectamente el
concepto de fotografía minimalista pues sucede con cierta frecuencia que subo
fotografías a Flickr de las que estoy satisfecho y no obtienen un gran número
de visitas y favoritos mientras que otras que considero más insustanciales
tienen una gran acogida. Algo de esto pasó con las fotos que traigo hoy.
Para las fotos minimalistas dan mucho juego las naves
industriales: elementos constructivos racionalistas: chapas plegadas,
carpinterías, tiradores, farolas… transmiten una sensación de asepsia y poseen además
una imagen actual que, querámoslo o no y aunque lo más importante de una
fotografía sea el motivo y la idea que se transmite, influye en la apreciación
estética de la imagen. También el color es otro componente que prolifera en
estos lugares. Atravesaba una etapa de poca inspiración así es que una tarde de
sábado me fui con mi cámara a un polígono industrial a hacer fotos
minimalistas. Todo estaba cerrado, desierto, a mi disposición para demorarme
tranquilamente en buscar y pensar cada foto. Nada más llegar vi una nave
totalmente pintada en naranja con las carpinterías en negro y, además, recién
pintada y como hacía una tarde de sol el edificio refulgía, así es que me
dirigí a ella. La primera foto que hice la hice con cierta desgana, una ventana con reja en un enorme paño
naranja, me parecía tan evidente que no lo consideraba un gran descubrimiento.
La sombra que la reja proyectaba sobre la pared creaba un efecto curioso,
enseguida me sugirió la imagen de las conexiones de un chip electrónico. La
imagen sin duda tenía cierta fuerza pero
desde luego ni un gramo de esa poesía que siempre deseo para mis fotos. La hice
y por más vueltas que le di a la nave no vi ninguna foto más, ya digo que
andaba corto de inspiración. La foto quedó abandonada en el ordenador, creo que
no le toqué ningún parámetro, ni reajusté el encuadre, nada. Esa tarde hice
unas cuantas fotos que me gustaron, la que más fue una de una manguera roja de
las que se utilizan para canalizaciones eléctricas tras una reja amarilla. Le
hice varias tomas y como ninguna me llenaba volví al día siguiente a
repetirlas. Había visto unos días antes una foto con esa idea: el objeto estaba
detrás de unos gruesos barrotes y aparecía entrecortado. Esta última la subí
inmediatamente a Flickr con un éxito relativo.
Cárcel para líneas curvas |
Como ya he dicho vuelvo a menudo sobre fotos
almacenadas, recientemente me topé con la de la ventana negra de la nave
naranja Chip y tal como estaba decidí
subirla: el número de visitas, favoritos y comentarios que ha logrado acaparar
en pocos días es de los mayores de toda mi galería.
Chip |
Comentarios
Saludos.