Este del humo es un tema clásico que todos hemos visto en
más de una ocasión y, si somos aficionados a la fotografía, fotografiado. Los
resultados son tan espectaculares que, de vez en cuando, apetece volver a él.
Medusas, radiografías, test de Rochas… la verdad es que son
muchas las imágenes que evocan estas caprichosas volutas, pero no se puede
dejar de pensar que se trata del humo que nos mata a los fumadores y viéndolo
adoptar estas formas tan bellas, tan sutiles y seductoras se me ha ocurrido relacionarlo
con el canto de las sirenas que, según la mitología, nos atrae irremediablemente
para acabar con nosotros. He decidido titular esta serie La belleza que nos mata.
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Humo 1 (2018) |
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Humo 2 (2018) |
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Humo 3 (2018) |
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Humo 4 (2018) |
Si hasta una sirena, tan esquivas, según se dice, ha querido
salir en las fotos. Bueno, prefiero pensar que la he sorprendido en un descuido.
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Sirena (2018) |
Comentarios
Siempre que observo el humo pienso en esas formas que a primer golpe de vista pueden parecer la resultante del caos, pero que en realidad es todo lo contrario, son el resultado continuado de una constante combinación entre densidades diferentes y los constantes cambios infinitesimales de temperaturas y presiones a las que están sometidas en cada instante.
Es una de esas cosas que tengo in mente hacer, pero que van pasando los años y las décadas y todavía no he hecho.